• Nutre el pelo a diario.
    1
    Nutre el pelo a diario.

    El pelo saludable es pelo brillante, así que el primer paso, y el más importante, es mantenerlo nutrido y cuidado. Esto quiere decir que debes usar un shampoo suave y abundante acondicionador hidratante para suavizar las cutículas del pelo.

  • Prueba un tratamiento con óleo.
    2
    Prueba un tratamiento con óleo.

    Da el siguiente paso y prueba un aceite para cabello para lograr un pelo suave que no se ve grasoso ni apagado.

  • Peina tu cabello a diario.
    3
    Peina tu cabello a diario.

    Al peinar tu cabello distribuyes los aceites naturales que produce el cuero cabelludo, por lo que el pelo quedará cubierto desde la raíz hasta las puntas y se verá naturalmente brilloso, mientras ayudas a evitar que se vea graso

  • Replantéate tu alimentación.
    4
    Replantéate tu alimentación.

    Es posible que tu alimentación influya en gran parte sobre cómo se ve tu cabello. Si incluyes alimentos ricos en ácidos grasos y Omega-3, como pescados azules, ayudarás a elevar las reservas de aceite que tiene tu pelo e incrementarás el brillo.

  • No olvides el tratamiento desenredante.
    5
    No olvides el tratamiento desenredante.

    Para tener un cabello muy brillante, asegúrate de mantenerlo humectado entre los lavados con un acondicionador sin enjuague como Dove Amplified Textures Super Slip Detangling Conditioner que ayuda a dejar el cabello rizado más manejable.